Partiendo tanto del cariño hacia la obra original como de un sentido crítico siempre en busca del chascarrillo, el primer tomo de la serie vería la luz durante el pasado Expocomic de Madrid 2011 abriendo las puertas al disparatado universo paródico basado en Juego de Tronos. Gracias al respaldo que ofrece el fenómeno creado en torno a la obra literaria así como la trayectoria de sus creadores, la sátira obtendría una cálida acogida por parte de los asistentes al certamen, por lo que se antojaba necesesario continuar Juego de Tronados con una secuela en base a los acontecimientos de la segunda temporada de la serie de televisión.
...
ZN.- Tras casi una década dedicada al cómic satírico en la mejor tradición de la generación “Bruguera”, seguramente cuentas con una perspectiva interesante para valorar su crecimiento durante este último siglo. ¿Cuales son las razones por las que crees que el género está tan arraigado en España y qué futuro le ves?
Sergio Ballester.- Yo creo que el estilo “Bruguera” y la historieta jocosa caracteriza al cómic español. Y con esto quiero decir que lo diferencia del cómic que se hace en otros países, no que sólo sepamos hacer ese tipo de cómic. En España, varias generaciones lo tiene arraigado porque durante mucho tiempo ha sido el tipo de historieta que ha predominado en este país y la mayoría hemos crecido con ello. Pero sinceramente, no creo que esté excesivamente valorado (aquí, el público en general sigue viendo el cómic como algo únicamente para niños) y hay pocas salidas profesionales, así que la inmensa mayoría de los autores tienen que adaptar su estilo al del cómic extranjero.
...
ZN.- Echando un vistazo a tus obras puede apreciarse una influencia tanto del género satírico patrio como cierto gusto por la experimentación narrativa. ¿Crees que en muchas ocasiones tiende a considerarse ambos términos como algo incompatible o incluso contradictorio? ¿Puede ser la sátira tan creativa a nivel artístico como cualquier otro género?
Ovidio Miguel Maestro.- No creo que el género satírico y la experimentación narrativa no puedan ir de la mano. Aunque sea de mala educación, contesto a tu pregunta con otra: ¿por qué motivo no iba a poder ser experimental este género? ¿Por qué iba a ser diferente a los demás? En todo caso, encuentro tu pregunta inspiradora, ya que es algo que seguramente muy pocos autores (entre los que yo me encuentro) se plantean, pues yo mismo soy bastante “clásico” cuando trabajo en ese género, dentro de lo que cabe. Aunque siempre me gusta adaptarme a las necesidades de lo que requiera el guión o la obra que esté parodiando en ese momento. Por poner un ejemplo: no es igual hacer una sátira de Juego de Tronos que de una película de James Bond, del mismo modo que las parodias de la revista MAD tienen poco que ver con las de los autores de El Jueves. En fin, que sí hay experimentación en el género, lo que pasa es que no se toma, irónicamente, demasiado en serio.